Al realizar la instalación del Comité Interinstitucional para la Atención del Desplazamiento Forzado de la entidad, el gobernador Alfredo Ramírez Bedolla aseguró que este fenómeno generado por la violencia en Michoacán, “es un punto ciego” que requiere atención inmediata.
Dijo que de todos los rostros de la violencia, este es uno de los temas menos tratados no solo en la entidad, sino en todo el país., por lo que fincó el compromiso de su gestión gubernamental por “atender con prontitud y eficacia” el fenómeno que mantiene a unas tres mil personas fuera de sus comunidades de origen y viviendo en albergues en la franja fronteriza.
Tras la toma de protesta a sus integrantes, el mandatario precisó todas las instancias de gobierno “deben trabajar de manera coordinada con las autoridades municipales para garantizar el retornó seguro de las familias desplazadas”.
En su turno, la titular de la Secretaría del Migrante (Semigrante), Brenda Fraga dijo que se realizó un trabajo de análisis de las condiciones en las que viven en Tijuana, BCN; en un promedio de 35 albergues, decenas de familias michoacanas.
Dijo que un total de 17 especialistas de diversos campos participaron en recorridos para atender y encuestar a los michoacanos desplazados, quienes en su mayoría son mujeres 71 por ciento y el resto hombres (29 por ciento).
La funcionaria de la Semigrante explicó que solo en 20 albergues se les permitió el libre acceso al grupo de especialistas, debido a que “hay desconfianza” debido a que en años anteriores sufrieron ataques.
Brenda Fraga, dejo en claro que “el 68 por ciento de las personas que fueron desplazadas de manera forzada, como consecuencia de la violencia, no presentaron denuncia ante la Fiscalía General del Estado (FGE)”.
