El dirigente del denominado Colectivo para el Desarrollo Transnacional de Michoacán, Felipe Ruiz López, estimó que a cuatro años de la desaparición del Programa Migrante 3×1 se ha generado un claro retroceso en la participación de los paisanos para el impulso de sus comunidades de origen.
Atrás quedaron –dijo- los enormes logros de otros periodos para los integrantes de los desaparecidos Clubes Migrantes que mucho aportaron al desarrollo de los municipios y las diferentes comunidades.
Lamentó que un migrante que hoy quiere coadyuvar con obras, entrega de materiales para la mejora de la vivienda de familias con escasos recursos, entre otros esquemas, se las deba ver solo, sin respaldo gubernamental. Incluso se ha frenado la ayuda humanitaria.
“En los más de cincuenta consulados que existen en Estados Unidos y algunos en Canadá, también se nos ha convertido en todo un viacrucis poder hacer un trámite en las respectivas oficinas porque las plataformas de Hacienda siempre están cerradas, no hay acceso, forma o alguna política humanitaria, tampoco para situaciones de emergencia”.
“Todos esos logros que teníamos se esfumaron; lo mismo sucede en lo local, en México hoy en día para lograr un pasaporte o para la donación de algunos insumos desde Estados Unidos tenemos una política tributaria nada eficiente, cuando en otros tiempos teníamos programas de colaboración con los diferentes niveles de gobierno. Pero hoy se derrumbaron”.
Después del 3×1 los esfuerzos ahora son individuales, por eso, añadió el tarimbarense Felipe Ruiz, insistimos como Colectivo en la necesidad de renovar una nueva alianza con los tres niveles de gobierno para que los migrantes puedan seguirle apostando al desarrollo de sus municipios y comunidades.
Llamó a los diputados y Senadores a ser verdaderos representantes de los héroes nacionales, los migrantes, y que no sólo se reconozca a los connacionales de palabra sino por sus logros y acciones para el desarrollo económico del país.
